sábado, 29 de septiembre de 2007

Malparidez Existencial



Las ratas me dan asco, y las arañas hasta me gustan. La altura despierta mis sentidos, y la oscuridad los agudiza. Pero una fobia a algún animal o situación particular, creo no tenerla, o bueno, de hecho debo admitir que sí existe una situación que me produce pánico y en la que detesto estar, se trata de cuando me entra la pensadera absurda, ese puto karma cerebral.


Ese que tengo ahora y que no se quita con una ducha, ese que te sorprende a la mitad de una canción que nunca te habías puesto a analizar, ese que deshabilita incluso a las funciones motoras y nos deja postrados en un terreno estéril que se llama soledad, y del que mejor no les sigo contando, no sea que esta vaina se pegue vía blog; y lo último que me faltaría es ser el causante de un cataclismo de este tipo, aunque con el número de gente que revisa éste chuzo, no pasaría de ser un par de casos aislados de profunda y avanzada malparidez existencial.




martes, 25 de septiembre de 2007

Epidemia, Moda, Coincidencia y Déficit de Condones


Hace apenas una semana que Natalia, una amiga muy cercana, me dijera que está embarazada, me tomó por sorpresa, pero al cabo de un par suspiros lo pude asimilar y le di un abrazo de esos que nacen en la nuca y se sienten en el pecho; seguramente ésta circunstancia no estaba en sus planes a corto plazo, sin embargo hay hechos en la vida que simplemente ocurren, y debemos afrontarlos con la mejor de las disposiciones, más aun cuando se trata de un regalo divino como un hijo. Me siento contento por ella, y por su nueva familia.

Hoy, Marta Angélica, otra de esas amigas de las que sabes que nunca te vas a librar :D , llega y me dice que está embarazada. Vivimos en ciudades diferentes y nuestra conversación fue por Messenger, Times New Roman en ocasiones resulta muy frio y la verdad no le creí. Le dije: “si fuera cierto ya te hubieran echado de la casa”… Efectivamente ya se había ido con sus ‘chiros’ para donde Tonny, el padre de la criatura y a quien también estimo mucho. Ésta vez si me hiperventilé, ya es el segundo ataque al órgano maquinador del futuro en éstos pocos días. A ella no la puedo abrazar en éste momento, pero sabe que cuenta con todo mi apoyo ahora y siempre.


Si se trata de un virus o el último grito de la moda, no lo sé. Si ha sido mera coincidencia o hay déficit de condones en el país por éstos días, tampoco lo sé; pero lo que queda claro es que el devenir es sorpresivo, y que nuestras vidas pueden cambiar ‘de la noche a la mañana’ (o en unos cincuenta minutos, pero probablemente entre la noche y la mañana) o de cualquier otra forma, pero siempre estamos ávidos al cambio. No dejo de pensar en que nos estamos volviendo viejos, que la vida se pone cada vez más real, y que lo queramos o no, ya llegará nuestro turno de enfrentar los retos que traiga el futuro. Por ahora vayan a la droguería mas cercana y abarrótense de muchos condones, de colores, formas y sabores, que de momento no hay mas plata pa sobrinos y ‘beibichauers’

Nos vemos en el próximo capítulo, y como dice la última de las embarazadas.... Saludos por allá y besos al chiquito.

viernes, 21 de septiembre de 2007

Del fin de semana y otras conspiraciones

El ‘wiken’, el ‘fincho’, o como quieran llamarlo, ha vuelto una vez mas, y yo no estaba preparado. Me cogió por sorpresa, limpio como de costumbre pero tan desprogramado como siempre; una vez más me resignaré a verlo pasar, con su juernes precoz, su viernes aventurero, su sábado engreído, y su domingo enguayabado.


Los más atrevidos se entregan a los placeres del fin de semana desde el jueves, espontáneos y decididos arman rumba desde temprano, provocan a todo el mundo, sobre todo a esos que no se arriesgan a llegar al día siguiente con ‘la gafa’, la aspirina, y el agua, a sus lugares de trabajo o estudio. Otros más convencionales, pero igual de ansiosos de recibir al fin de semana como a toda una celebridad, se pierden en la noche joven del viernes, abandonan sus oficinas y aulas de clase afanados, desesperados, y dispuestos a todo para abandonar y olvidar de momento el trajín de la semana. Algunos repiten, otros no, pero a la noche del sábado no le falta gente, la euforia es gratis por la calle, las luces parecen brillar más, y el cielo se ve más oscuro, más maduro. Finalmente llega el triste y aburrido domingo, que subraya el inicio de una nueva semana, carga las secuelas dejadas por los días previos, guayabos acumulados, lagunas mentales, y un par de arrepentimientos obsoletos, que afortunadamente se neutralizan con los rezos y plegarias de cientos de abuelitas incansables que visitan cada domingo, templos e iglesias. La historia semanal vuelve a empezar con el lunes antipático, el martes monótono y el miércoles de locos, hasta repetir las travesuras del único final más extenso que el resto del resto de la obra, los últimos 4 de los 7 días de la semana.


Cabe resaltar que no falta el descarado que no respeta días, que en su calendario la semana empieza en luernes, y sigue en la misma tónica todo el septenario. Así como otros aburridos que no festejan ni por la muerte de un obispo (y no es que eso se deba festejar, es que así dice el adagio popular). Pero como les decía, yo de momento me quedaré en casa, acompañado de mis roommates y mi PC; viendo como el fincho nos distrae mientras que el resto de la próxima semana conspira para darnos con todas sus fuerzas ahí, entre las piernas.

martes, 18 de septiembre de 2007

$eptiembre!

Las circunstancias de la vida, me han llevado a hacer muchos amigos, del mismo modo me han llevado a quedar en la ruina cada septiembre. Yo no tengo nada en contra del día de amor y amistad, por el contrario me parece que ésta fecha nos brinda la posibilidad de expresar a nuestros amigos cercanos algunas cosas que normalmente no demostraríamos; el punto cruel del asunto es el popular juego del amigo secreto, que en muchas ocasiones no resulta siendo ni amigo, ni secreto.

Al menos así suele pasar en mayoría de colegios, empresas, y demás agrupaciones donde se lleva a cabo éste tormentoso rito acaba bolsillos, por más que reces y te encomiendes al mismísimo Hermes (Dios del azar), luego de desenrollar ese nudo de papelito la primera expresión de tu rostro se manifiesta en las arrugas de tu frente, y un susurro interno que dice… “¿Fabián?” o “¿Marcela?” o cualquier otro nombre que no consigues relacionar a ese grupo. Así que con mucho sigilo te dispones a acabar con la otra mitad del nombre del juego y entre dientes le preguntas a uno, que sí es tu amigo, “¿cuál es Fabián?”. Asunto acabado, el juego ha perdido totalment45e su razón de ser, el papel que tomaste hace unos minutos se convirtió en un pagaré, y luego de especificar el mínimo monto a pagar, no queda más queda mas que esperar que el día de la entrega, el portador de tu nombre salga con una sorpresa, y no con una sorpresita.

Otros vientos soplan cuando se juega en realidad entre amigos, es incluso económico porque sólo tienes que dar un regalo y todos quedan contentos, éste año con mi grupo de amigos de la U fue imposible jugar, aplazamos y aplazamos el juego hasta que se nos pasó la fecha, y pues ‘ya pa qué’ otro año vendrá cargado con las mismas fechas, ya tendremos otra oportunidad de empacar regalos y romper empaques.

A mis amigos lectores no puedo más que desearles que nunca pierdan el link a ésta página, y que rindan honores a este mes de septiembre haciendo mucho el amor y la amistad. Y eso si, no se mueran de amor.

Cambio y fuera