domingo, 2 de diciembre de 2007

SIDA? No, gracias

Empezó diciembre, y empezó con una muy buena causa. Ayer, uno de diciembre, se celebró el día internacional de la lucha contra el sida; que se conmemora desde hace unos veinte años cuando se advirtió el vertiginoso crecimiento del número de afectados por éste mal; y se escogió ésta fecha por que en un día como éste del año 1981, se registró el primer caso conocido. (Ojalá hoy se conociera el último de todos)

El sida es uno de esos grandes puntos a resolver en la humanidad si queremos mantenernos un par de milenios más sobre éste pedacito de tierra húmeda con forma ahuevada que se llama Tierra. A la fecha ha apagado unas treinta millones de vidas (algo así como la mitad de toda la población de Colombia) y sigue en acción. Las campañas educativas referentes al tema no han podido contener éste fenómeno (Al parecer el hambre puede mas que cualquier otra cosa) aunque no por eso debamos decir que sean inútiles. Admiro, por ejemplo, lo que ha venido haciendo el gobierno de Brasil para frenar la propagación del SIDA en su país, donde se atiende casi la tercera parte de las personas tratadas en el mundo por ésta enfermedad, ellos han instalado dispensadores de condones en las escuelas públicas, para jóvenes mayores a 13 años. No hay razón para escandalizarse, tampoco hay razones para pensar que se está induciendo a la población al sexo o a la promiscuidad desde temprana edad, simplemente por un hecho; no hace falta una campaña explícita para promover el sexo desde la preadolescencia, eso ya es una realidad. En Cartagena éste año también se distribuyeron unos cinco mil condones, con su respectiva información en los principales sitios turísticos, pese a la alaraca y show de los grupos tradicionalistas presentes en la ciudad.

Tan sólo quiero entonces poner mi granito de arena, unirme a esta causa global para ver si podemos de alguna forma reducirle el exponente a ésta ecuación de crecimiento constante. Roguemos también para que una mente brillante encuentre pronto una cura. Y como les decía en un capítulo anterior (aunque con otro propósito)… Por favor usen gorro, forrito, látex, paraguas o como sea que le quieran llamar al popularísmo CONDÓN.

Vuelvan pronto.